La consciencia se forma permanente y continuamente por la cantidad, la calidad y la frecuencia de sentimientos y pensamientos que resultan de los datos e informaciones que aportan las experiencias. Estas derivan conocimientos, saberes y habilidades como productos de la observación y de la vivencia de cada momento. Por esto, informarse e informar sobre lo que ocurrió y está ocurriendo exige inteligencia, responsabilidad personal y social; exige una profunda disposición del ánimo para buscar, encontrar, analizar y criticar las apariencias hasta llegar a la verdad y la certeza de los hechos, separando todo cuanto sea falso, engaño, mentira, manipulación o cualquiera otro elemento que los sesgue. La búsqueda de la verdad y de la certeza ha hecho sabios a los seres humanos; en última instancia, es lo que ha configurado efectivamente lo más preciado que tenemos: la cultura de la verdad y la consciencia que de ella se deriva
Historia del Periodismo en Colombia